El día de las velitas es una tradición colombiana muy arraigada en la cultura y que realmente da inicio a la navidad. Se celebra cada 7 de diciembre, en la víspera de la Inmaculada Concepción, y consiste en encender velas y faroles en las calles, ventanas y balcones para iluminar la noche con un ambiente festivo y familiar.
Esta costumbre tiene su origen en el siglo XVIII, cuando el papa Pío IX proclamó el dogma de la Inmaculada Concepción de María, y los fieles católicos salieron a las calles a prender velas para celebrar el anuncio. Con el tiempo, esta práctica se fue extendiendo por todo el país y se convirtió en una de las fiestas más populares y queridas por los colombianos.
El día de las velitas es una oportunidad para compartir con la familia y los amigos, y también para hacer de este día una experiencia memorable para los niños. Los más pequeños disfrutan mucho de ver las luces de colores, los diseños creativos de los faroles y el ambiente alegre que se respira en las calles. Además, pueden participar en la elaboración de los faroles, que pueden ser de papel, cartón, plástico o cualquier otro material que se les ocurra. También pueden ayudar a decorar el espacio donde se van a colocar las velas, ya sea con flores, frutas, dulces o lo que prefieran.
El día de las velitas tiene un significado especial para los colombianos, ya que representa la fe, la esperanza y la alegría de la navidad. Encender una vela es una forma de expresar un deseo, una oración o un agradecimiento. También es una forma de recordar a los seres queridos que ya no están con nosotros, pero que siguen iluminando nuestro camino. Así mismo, es una forma de celebrar la vida, la paz y la unión familiar.
Recomendaciones para la noche de velitas
Sin embargo, para que esta festividad no se vea opacada por la negligencia o el descuido, es importante tener en cuenta algunas recomendaciones de cuidado y prevención en el hogar. Algunas de ellas son:
- Elegir un lugar seguro y ventilado para colocar las velas y los faroles, lejos de materiales inflamables o cortinas.
- No dejar a los niños solos con las velas o los fósforos, y supervisar siempre su manipulación.
- Apagar las velas antes de irse a dormir o salir de casa.
- Tener a mano un extintor o un balde con agua por si se produce algún incendio.
- Evitar el uso de pólvora o fuegos artificiales, ya que pueden causar quemaduras, heridas o daños auditivos.
- Respetar las normas sanitarias vigentes por la pandemia del COVID-19, como el uso de tapabocas, el lavado frecuente de manos y el distanciamiento social.
Siguiendo estos consejos, podremos disfrutar del día de las velitas con seguridad y tranquilidad, y hacer de esta tradición una ocasión para fortalecer el vínculo familiar y el espíritu navideño.
Actividad para crear un farol de vela para niños
Los faroles son unos recipientes que contienen una vela y que se decoran con papel, cartón, plástico o cualquier otro material que se les ocurra. Los hay de diferentes formas, tamaños y colores, y son una forma de expresar la creatividad y la imaginación.
Si quieres hacer un farol de vela para niños, te proponemos una actividad muy sencilla y divertida que puedes hacer en casa con materiales reciclados. Necesitarás:
Materiales:
- Un frasco de vidrio vacío y limpio (puede ser de mermelada, salsa o cualquier otro producto)
- Una vela pequeña
- Papel de seda o papel crepé de varios colores
- Pegamento blanco
- Tijeras
- Un cordel o una cinta
Los pasos a seguir son:
- Corta el papel de seda o papel crepé en trozos pequeños. Puedes usar los colores que más te gusten o combinarlos para crear un efecto arcoíris.
- Aplica pegamento blanco por todo el exterior del frasco de vidrio y pega los trozos de papel sobre él, cubriendo toda la superficie. Deja secar bien el pegamento.
- Coloca la vela dentro del frasco y enciéndela con cuidado. Si quieres, puedes poner un poco de arena o piedritas en el fondo del frasco para que la vela quede más firme.
- Ata un cordel o una cinta alrededor del cuello del frasco para poder colgarlo o sostenerlo.
- ¡Ya tienes tu farol de vela para niños! Puedes colocarlo en tu ventana, balcón o patio, o llevarlo contigo a la calle para celebrar el día de las velitas con tu familia y amigos.
Esta actividad es una forma de compartir con los niños una tradición muy arraigada en la cultura. Además, es una forma de fomentar su creatividad, su motricidad fina y su conciencia ecológica al usar materiales reciclados.